Un caso extraordinario de conservación y rehabilitación animal se registró en el centro de conservación Chiloé Silvestre, donde una cervatilla de pudú nació sana tras el prolongado proceso de recuperación de su madre, quien había sufrido un brutal ataque de perros. Este acontecimiento ha sido calificado como único en la historia del centro por su alto grado de complejidad.
De acuerdo con información compartida desde la ONG, la cervatilla, una pequeña hembra que pesa 965 gramos y mide 25 centímetros, nació bajo estricta vigilancia y cuidado. Tanto la madre como su cría permanecen en un recinto externo monitoreado por cámaras trampa para garantizar su bienestar.
El equipo de Chiloé Silvestre destacó que este logro es excepcional, ya que, en muchos casos, los pudúes que ingresan a su centro no sobreviven debido a la miopatía por captura, una condición relacionada con el estrés severo ocasionado por ataques o atropellos. La rehabilitación exitosa de la madre, que requirió un cuidado intensivo y prolongado, marcó la diferencia en este caso.
SORPRESIVO NACIMIENTO
Javier Cabello, presidente de la ONG de conservación, recordó que recibieron a la pudú el 12 de mayo, luego de que fuera atacada y rescatada por la vecina Paula Manríquez y su familia en el sector de Tarahuin.
“Venía atacada por perros, muy mordida, muy deteriorada, con heridas bastante complicadas que se fueron empeorando en el transcurso de más o menos dos semanas. Esta pudú siempre aguantó estas heridas, que se complicaron aún más, llegando incluso hasta el hueso en la parte de la pierna. Pensamos varias veces que se iba a morir, por la experiencia que hemos tenido con otros pudúes, pero pasadas estas tres semanas, la herida comenzó a sanar, la infección cedió y empezó a recuperarse. La pudú siempre estuvo atenta, comiendo, dispuesta a los tratamientos. Nosotros la anestesiábamos cada dos o tres días para hacerle curaciones. Lo primero fue su recuperación tan prolongada; un animalito que es tan sensible al estrés. Eso fue lo que más nos llamó la atención”, explicó.
Agregó que, durante el proceso de atención, inicialmente no se percataron de que estaba preñada, lo que se convirtió en una sorpresa. Señaló que lo usual en estos casos, debido al alto nivel de estrés, es que terminen abortando, lo que no ocurrió.“En este último mes la notamos un poco más gordita, y en la última semana dejó de comer. Nos dio la sorpresa de que, de un día para otro, tenía una cría. Así que muy contentos. Animales de este tipo existen en criaderos y en otros lugares donde se reproducen sin mayor problema, pero lo llamativo en este caso es que es un animal totalmente silvestre, que fue rescatado de un ataque de perros y que, además, dio a luz en cautiverio”, comentó.
Agregó que “estas cosas nos llenan de alegría, nos motivan a seguir trabajando, porque normalmente las noticias con este tipo de animales son siempre lamentables, ya que mueren debido a las lesiones con las que llegan. Estamos todos contentos, el equipo completo. Quisimos tomarlo con calma también porque, al nacer un animal bajo estas condiciones, hay riesgo de que pueda fallecer. Pero ya lleva una semana, está bien, está sana, ha tomado leche, entonces estamos contentos”, aseveró.
LIBERACION
En esta línea, señaló que ahora están evaluando las condiciones en que serán liberadas la madre y su cría. Por el momento, esperarán a que la cervatilla sea un poco más grande, para lo cual se entregarán otras comodidades.“Vamos a trasladarlas a un recinto más grande, para que puedan desenvolverse las dos, como si estuvieran en la naturaleza. Creo que vamos a esperar unos tres meses más, hasta que la cría esté más estable, un poco más grande y comiendo por sí sola. Seguiremos con el mismo proceso de liberación, ya que es nuestro objetivo recuperar a los animales y llevarlos a la libertad”, expresó.
Fuente:
El Insular Chiloé